lunes, 23 de agosto de 2010

NATURA NOS PRESTA

Ésta historia también empezó con mi hija mayor. Ser primer hijo tiene mas costos que privilegios.
Ella tenía unos nueve años; volvíamos los dos, caminando de regreso de la escuela. "Pá en la escuela me dijeron que lleve un pescadito"...
-¿de dónde lo vamos a sacar? le pregunté
"del Lago del Bosque como las demás chicas"
-¿y después que va a pasar con él?
luego de un titubeo me dijo ... "se va a morir"

Nos quedamos unos minutos en silencio...algo nos hablaba del interior que no nos dejaba contentos.

Le propuse entonces ir a una casa de venta de peces y comprar uno, con la intención de que no muriera. Nos entusiasmamos los dos con la idea y así lo hicimos.
Como es la costumbre, nos lo entregaron en una bolsita y de allí, al llegar a casa lo pusimos en un frasco de aceitunas limpio y desocupado; y según las someras indicaciones que nos dieron, lo dejamos en el mismo agua de la bolsa.

Aquí empezó una larga historia sin final. Al día siguiente compramos otro pez "para que no estuviera solo" y una pequeña pecera cuadrada. Allí aprendimos que no tienen que ser redondas porque le disminuye la cantidad de oxígeno.

Como es mi estilo adquirí manuales e hice consultas. Aprendí por ejemplo, sobre la aireación, y que los peces crecen en relación a ésta. También sobre alimentación, conservación del agua y muchas otras cosas mas.

Fuimos con el tiempo aumentando los tamaños de peceras e incluso llegamos a tener peces de agua fría y peces tropicales.

En realidad les recomiendo ser prudentes e informarse bien, dado que el noventa por ciento de los principiantes fracasan por creerse que la cosa es fácil y que no hay nada por saber.

Desde hace muchos años nuestra pecera es muy enorme y la hicimos construir con unos cristales de una mesa y una vitrina antigüa. Pero hasta ahí nos quedamos, muy contentos y conformes.

Los peces tienen un magnetismo especial que atraen a los chicos y a los grandes. No hay necesidad de fanatizarse, pero si, de hacerlo bien.

Creo, al menos para mi, que lo mas importante de todo ésto, es que "no dejamos morir a aquel pescadito" de lo cual hace ya, unos veintiocho años. Y también, el hecho de haber aprendido tantas cosas interesantes y vivido nuevas situaciones lindas . Y de haber compartido esta vivencia con mi hija y toda la familia, ya que todos nos quedamos enganchados y contagiados.

14 comentarios:

Vaeneria dijo...

Me encantó! Yo también tuve pecera y realmente me relajaba. Es un espectáculo único.
Hermoso recuerdo.
Saludos :)

magu dijo...

Linda historia, habla del cuidado animal, sobre todo de tu hija hacia ellos, y de tu interés en cuidarlos con cariño

jajaa
pensé que el final sería que
terminaron teniendo un delfín en una pelopincho
jaja
por suerte no fue pa tanto
saludos

Gla dijo...

Seguro que tu hija cada vez que ve tu pecera, recuerda la gran lección de vida que le diste...esas cosas de la infancia se aprenden a fuego...

geminis dijo...

Realizar ese tipo de actividades al lado de las personas que se aman, siempre es divertido y permanece en nuestra memoria, los peces son lindos, tienes razón no es facil, a mi siempre se me mueren, por eso ahora solo tengo una tortuga que por suerte no ha muerto.
besos

Caro Pé dijo...

"para que no estuviera solo" jajja
Beso!

Anónimo dijo...

que buena historia!
increible como partiendo de un pez para el colegio surgió tu interés y estudiar y averiguar sobre el tema para crearles un lugar como el que necesitan.
mi primer pez vivió también en un frasco de mayonesa!


un beso

LAO dijo...

Vaeneria muchas gracias ¿viste que lindo que es? Muchos saludos

LAO dijo...

magu. Gracias! me diste una idea... tengo una pileta que tal vez sirva para delfines. Ja! Saludos!

LAO dijo...

Gla. "como que quedó gravado a fuego, en todos nosotros" ¡que cosas tiene la vida! gracias y saludos...

LAO dijo...

geminis. Son medios para fortalecer vínculos y mucho mas.... Me diste una idea... modestamente, creo que voy a transcribir algunas cosas para evitar que los peces no se mueran. Pienso que a alguien le va a interesar y/o aportar otros consejos. Un beso, muchas gracias.

LAO dijo...

Caro Pé ¿que locos no? .Un beso.

LAO dijo...

nadasepierde. La curiosidad es un don
para desarrollar y "no quedárselo para uno solo" "como el chico que no quiere convidar caramelos". Parece que las aceitunas y la mayonesa sirven para algo mas...Es bueno no tirar los frascos... Gracias! Un beso

esteban lob dijo...

Hola Lao:

Lindas historias las de la pecera...y la del potrillito.
(Los adquirentes del "producto robado" deben agradecer que les tocó alguien de tan buen corazón)

Un abrazo.

LAO dijo...

Muchas gracias ESTEBAN. un abrazo